Belleza: La UE prohíbe vender cosméticos testados en animales

A veces soy muy frívola, pero otras veces soy muy seria. Hace poco más me encontré con una nueva noticia , casi por casualidad porque apenas la he visto en medios generalistas: la Unión Europea ha prohibido la venta de cosméticos para cuya elaboración se experimente con animales. Creo que se trata de una noticia con mucha relevancia en nuestros días y que todo el mundo debería tener conciencia de estas cosas. He aquí mi pequeño granito de arena.

Después de 20 años de lucha de algunas empresas y asociaciones, en los que se ha ido introduciendo esta ley en varias fases, esta prohibición impide la importación y venta de ingredientes y productos que hayan sido probados en animales en la UE. La prohibición está ahora en pleno funcionamiento, lo que garantiza que ninguna empresa pueda llevar a cabo nuevos ensayos en animales con fines cosméticos fuera de la unión europea para los productos que se vendan en la UE a partir de ahora.


Lo que esto supone es un fuerte mensaje a todo el mundo, tanto empresas como a los propios ciudadanos y/o compradores, a favor de la belleza sin crueldad animal y de una filosofía mucho más centrada en el beneficio del medio ambiente y de los seres que lo habitan. Me parece un tema interesante donde los haya y por eso quería reflexionar un poco sobre el asunto.

El consumidor no tiene por qué verse afectado por el cambio del tipo de testeo en sus productos


Pero, ¿qué límites encuentra esta nueva normativa ya en vigor? ¿Qué trampa tiene esto y en qué afecta a los gastos de las empresas? Para solventar estas y algunas otras dudas, he hablado con Natalia D. Rizzo, subdirectora en España de AnimaNaturalis Internacional.


Natalia, primero de todo, ¿qué supone esta nueva prohibición en concreto?

Desde el 11 de marzo quien desee vender nuevos productos e ingredientes cosméticos en la UE, no debe probarlos en animales en ninguna parte del mundo. Esta ley supone la séptima de las modificaciones de la ‘directiva sobre cosméticos’, que data de 1976. La directiva de 2003 estableció en dos las fases para la prohibición de los ensayos de cosméticos en animales. La primera de ellas entró en vigor en 2009; la segunda, el día 11 de marzo. Y es que hasta este día, experimentos como toxicidad de dosis repetidas, toxicidad reproductiva y ‘toxicocinética’ estaban permitidos.


Y, exactamente, ¿a quién afecta esta prohibición?

Afectará a artículos de aseo y belleza: todos los cosméticos, incluyendo artículos de aseo y productos de belleza, desde jabón a pasta de dientes.


¿A qué obliga esta prohibición y en qué medida?

La prohibición obliga a que las empresas no puedan hacer sobre los animales los testeados de sus productos. Ni en la UE ni en ninguna parte del mundo para que sean comercializados en la UE.

Con las nuevas formas éticas de testeo podremos estar 100% seguros de la fiabilidad de los resultados


Me preocupa el límite de la UE, es decir, ¿se puede experimentar en la UE pero no se puede vender en ella? O por el contrario, ¿se puede experimentar fuera y venderlo aquí?

De las industrias ya mencionadas, de aseo, cosmética y belleza, nada podrá ser testado en animales en la UE y no se podrá comercializar nada dentro de la UE que haya sido testado sobre animales fuera de nuestras fronteras.

Pensando en las empresas, ¿qué cambios supone esta prohibición en la producción actual de cosméticos y en las investigaciones que se llevan haciendo todo este tiempo?

Las empresas tendrán que utilizar alternativas a las prácticas que estaban haciendo hasta el pasado 11 de marzo. Para ello pueden utilizarse técnicas como las reconstrucciones de piel humana para probar si un ingrediente puede causar irritación cutánea, o sistemas informáticos.

¿Qué pasa con los productos que se han conseguido con experimentación animal ya existentes?

La Ley no tiene carácter retroactivo. Es decir, los productos que sí fueron experimentados NO se retirarán, puesto que sí cumplían con la legalidad cuando fueron fabricados. Así que durante varios meses o incluso años, muchos productos seguirán en el mercado hasta que se agoten. Lo que cambia es que las nuevas marcas o productos ya NO serán testados en animales en la UE ni entrarán en la UE los que se hayan testado en otros países.

Cuando se testea en animales, los resultados no son exactos, sino extrapolables

¿Qué beneficios supone para el producto en sí mismo y para la salud pública?

Los beneficios son muchos, principalmente los animales dejarán de morir en crueles e innecesarios testeos en los laboratorios. Los productos serán testados con alternativas éticas, viables y sobre todo, más fiables, puesto que cuando se testea en animales, los resultados no son exactos, sino extrapolables, lo que no los hace del todo fiables para las personas aunque sí aptos. Con las nuevas formas éticas de testeo podremos estar 100% seguros de la fiabilidad de los resultados y de la seguridad que supone eso para las personas.

¿Qué supone para el entorno natural?

Eso depende del tipo de testeo que se haga en cada caso y para cada producto. Sin embargo, la tónica general repercute en un descenso del impacto medioambiental en las puebas, ya que al no usar anumales, se elimina el deshacerse de sus cuerpos una terminado el experimento, ya que éstos pasan a ser residuos de la industria.

¿Qué supone para el mercado en general y para el consumidor en particular?

El consumidor no tiene por qué verse afectado por el cambio del tipo de testeo en sus productos.




¿Qué pensáis vosotros de este tipo de políticas? ¿Creéis que de verdad se están haciendo adelantos para el medio ambiente con este tipo de acciones? Contádmelo todo aquí o en la página de Facebook. 

A.Z. 

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